martes, 12 de mayo de 2015

Decálogo para ser un/a buen/a escritor/a

¡Buenos días a tod@s!

Hoy, cómo no tengo mucho tiempo para escribir (mañana tengo el examen de filosofía), os quiero dejar con uno de los decálogos que más me ha gustado para llegar a ser una escritora. Es breve, conciso, fácil de entender y a la vez transmite el esfuerzo y la perseverancia que se ha de emplear para llegar a ser un buen escritor. 


Escribe
Escribe más.
Escribe todavía más
Escribe incluso todavía más
Escribe cuando no tengas ni ganas
Escribe cuando las tengas
Escribe cuando tengas algo que decir 
Escribe cuando no tengas nada que decir
Escribe cada día.
Continua escribiendo.
Brian Clark, dramaturgo
y guionista británico

Y siguiendo con los decálogos, os dejo este Decálogo, de mi querido Augusto Monterroso, máximo representante del microrrelato español. (Este es más largo, pero es interesante echarle un ojo ;)


Primero.
Cuando tengas algo que decir, dilo; cuando no, también. Escribe siempre.

Segundo.
No escribas nunca para tus contemporáneos, ni mucho menos, como hacen tantos, para tus antepasados. Hazlo para la posteridad, en la cual sin duda serás famoso, pues es bien sabido que la posteridad siempre hace justicia.

Tercero.
En ninguna circunstancia olvides el célebre díctum: "En literatura no hay nada escrito".

Cuarto.
Lo que puedas decir con cien palabras dilo con cien palabras; lo que con una, con una. No emplees nunca el término medio; así, jamás escribas nada con cincuenta palabras.

Quinto.
Aunque no lo parezca, escribir es un arte; ser escritor es ser un artista, como el artista del trapecio, o el luchador por antonomasia, que es el que lucha con el lenguaje; para esta lucha ejercítate de día y de noche.

Sexto.
Aprovecha todas las desventajas, como el insomnio, la prisión, o la pobreza; el primero hizo a Baudelaire, la segunda a Pellico y la tercera a todos tus amigos escritores; evita pues, dormir como Homero, la vida tranquila de un Byron, o ganar tanto como Bloy.

Séptimo.
No persigas el éxito. El éxito acabó con Cervantes, tan buen novelista hasta el Quijote. Aunque el éxito es siempre inevitable, procúrate un buen fracaso de vez en cuando para que tus amigos se entristezcan.

Octavo.
Fórmate un público inteligente, que se consigue más entre los ricos y los poderosos. De esta manera no te faltarán ni la comprensión ni el estímulo, que emana de estas dos únicas fuentes.

Noveno.
Cree en ti, pero no tanto; duda de ti, pero no tanto. Cuando sientas duda, cree; cuando creas, duda. En esto estriba la única verdadera sabiduría que puede acompañar a un escritor.

Décimo.
Trata de decir las cosas de manera que el lector sienta siempre que en el fondo es tanto o más inteligente que tú. De vez en cuando procura que efectivamente lo sea; pero para lograr eso tendrás que ser más inteligente que él.
Undécimo.
No olvides los sentimientos de los lectores. Por lo general es lo mejor que tienen; no como tú, que careces de ellos, pues de otro modo no intentarías meterte en este oficio.

Duodécimo.
Otra vez el lector. Entre mejor escribas más lectores tendrás; mientras les des obras cada vez más refinadas, un número cada vez mayor apetecerá tus creaciones; si escribes cosas para el montón nunca serás popular y nadie tratará de tocarte el saco en la calle, ni te señalará con el dedo en el supermercado.

El autor da la opción al escritor de descartar dos de estos enunciados, y quedarse con los restantes diez.


¿Qué os han parecido? ¡A mi con leerlos, ya me dan ganas de ponerme a escribir! Que ganas de acabar las recuperaciones finales jejejeje Que tengáis buena mañana! 

1 comentario:

  1. Yo escribo para mi, para desahogarme, si a alguien le gusta mi pluma me alegro si no es así, pues... cada uno tiene sus gustos, no puedo hacer que todo el mundo me ame jaja
    un beso

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