domingo, 1 de junio de 2014

Estudiando... Todo un arte

¡Buenos días a todos! De buena mañana ya he empezado a estudiarme el temario que me queda para los próximos examenes de recuperación.... La mosca que vuela por mi salón es realmente interesante al lado de las frases subordinadas, la pronominalización catalana, la gran pila de libros de lectura del insti que tengo que volver a leer y un curso entero de inglés. Si, no soy muy buena para los idiomas, ¡pero que le vamos a hacer! A veces me van bien, y otras no. Hay una imagen que parte de ciertas verdades, en el sistema educativo.


¿Que os parece? Es cierto que a la hora de examinar, todos debemos hacer un mismo tipo de examen, estoy de acuerdo, pero está claro que los recursos que nos imparten a veces no son del todo los adecuados para cada uno, ¿no creéis? Cada individuo es distinto, y se le debería de fomentar con más ímpetu lo que le atraiga con más atención, y se desenvuelva con mayor margen en tales actividades. Y deberían impartir clases especializadas para que cada uno encuentre su manera de estudiar, dentro de el horario de clases. Por que al fin y al cabo, aunque nos muestren una manera de estudiar y nos adaptemos a ella, no todos sabremos llevarla mejor que otros. En fin, y que más deciros... Mientras escribo esto, se me está ocurriendo un pequeño texto sobre este hastío momento. Veamos...

Mi mente vuela muy lejos a la hora de estudiar, aletea rápidamente, junto a la mosca que hace unos minutos se había posado encima de mi mesa, observándome y frotándose las patitas delanteras, como si trazase un pérfido plan. Se ha llevado mi imaginación fuera de mi alcance, cuando el insecto se escapó por la rendija de la ventana. ¿Donde puede estar ahora ella, junto a mi creatividad? En algún jardín extraño, o tal vez sobrevolando altos pisos, disfrutando de la extensión del cielo azul. ¿Volverá de nuevo para devolverme lo que es mío? Mientras leo sin mucho afán las  hojas que tengo delante, pienso que, sinceramente, preferiría que no volviera. Aquel insecto se había llevado mis fantasías y mi ingenio, y, que el hombre escuche lo que tengo que decir, porque no quiero volver a ver mi imaginación. Deseo que se la lleve lejos ese pequeño animal, que vea mundo y todas las maravillas que hay en él, para cuando esté hinchada de conocimientos increíbles y misteriosos, vuelva a mí para enseñarme todo lo que no puedo ver yo, frente a todas estas hojas de papel que me he de estudiar.
¿Os gusta? Bueno, seguiré con el estudio y... ¡Buena mañana! ;)



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